2.14.2010

Estudio Bíblico Familiar N°13

La caída de Adán
(por Natali Espinoza)


Adán fue padre y representante de toda la humanidad

Entendemos que Adán no estaba destituido de la gloria de Dios.

Génesis 2:16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer

Con esto Dios le asignó una ley a Adán, además de libertad y vida inmortal con la condición de que obedeciera, lo que aseguraría tanto a él como a todos nosotros.

Por lo cual Dios impuso prueba de obediencia a Adán la cual determinaría su felicidad y también puso advertencia sobre la desobediencia y las consecuencias que ésta le traería. Esta prohibición pondría a prueba sus deleites sensibles, su curiosidad por saber y su apetito personal.
Adán es amenazado con la muerte en caso de desobediencia.

Génesis 2:17 “mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.”

La serpiente y Eva

Génesis 3:1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Con que Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?

Con esto la serpiente puso en duda si era pecado o no comer de los árboles del huerto ya que no especifica uno, como lo hizo Dios cuando advirtió a Adán.

El diablo actúa con seducción y engaño, poniendo en duda la palabra de Dios.

Génesis 3:4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

Negando que hubiera peligro en el mandato de Dios. Además sugirió que esto traía muchas ventajas

Génesis 3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

Esta táctica astuta de Satanás al empañar la reputación de la ley divina haciendo pasar por incierta e irracional, para atraer así a la gente al pecado.

Génesis 3:2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer;
3 pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.

Fue una debilidad de la mujer el entrar en conversación con la serpiente, es muy peligroso hacer trato con la tentación, porque en realidad debería ser rechazada al instante con decisión y aborrecimiento.

Junto con esto en el versículo 3, Dios no había dicho nada en cuanto a no tocar el árbol, como si su contacto significase algún tipo de maleficio. Esta exageración fue la causa de su caída, más bien diremos fue una señal de la perturbación que la sugestión de la serpiente empezaba a producir en la mente de Eva.

Además en el versículo 4, Satanás señala a Eva que por comer del fruto no morirá, negando que haya peligro en ello ni sanción al hacerlo.
Satanás enseña a los hombres primero a dudar y luego a negar, los hace escépticos y gradualmente los hace ateos.
Por lo que se puede decir que la tentación se inició cuando Satanás introdujo duda y negó la palabra de Dios.

Juan 8:44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.

En Génesis 3:5, Satanás le promete las ventajas que conlleva el comer del árbol. No habría podido persuadirles a correr el riesgo y arruinarse si no les hubiera sugerido una gran posibilidad de mejorarse.

Con estas insinuaciones y ofrecimientos intenta producir en ellos:
1.- descontento con su actual estado.
2.- ambición de ser promocionados como si fueran aptos para ser dioses.

Génesis 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.
7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales.
8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.


Luego de comer del fruto, no vieron daño alguno en el árbol. Les pareció tan bueno como cualquier otro alimento del huerto, entonces ¿Por qué les habría de estar prohibido este árbol?
A veces caemos en trampas traicioneras por un deseo desordenado de dar satisfacción a nuestros sentidos. Fue tanto más codiciado precisamente por estar prohibido

En relación al versículo 6 donde señala; “y tomó de su fruto, y comió”. Observar que muchos pecados entran por los ojos.
Tomar del fruto fue un acto de la propia iniciativa de Eva. No fue el diablo quien lo tomó y se lo puso a ella en la boca, sino que, ella misma lo tomó. Satanás puede tentar, pero no puede forzar; puede persuadirnos a que nos arrojemos al vacío, pero no puede arrojarnos él mismo.

El ataque de Satanás a Eva fue triple, al igual que como lo hizo con Jesús (Mateo 4:1-11) y al igual como lo explica Juan en; 1 Juan 2:16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.

No moriréis = los deseos de la carne
Serán abiertos vuestros ojos = los deseos de los ojos
Seréis como Dios sabiendo el bien y el mal = la vanagloria de la vida

Génesis 3:1-5

La caída de Adán y Eva dio como resultado conciencia de pecado, de condenación y de separación de Dios, como lo indica el hecho de que Adán y Eva se escondieron de Jehová Dios.

Génesis 3:8-13.

La Naturaleza del hombre se hizo maligna y enemiga de Dios

Romanos 5:19 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos.
Romanos 8:7 Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden;
8 y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.

Este estado de muerte espiritual finalmente resultó en muerte física

Romanos 5:12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

Todos debemos morir en la carne ya que heredamos la condición de pecado de Adán y el pago del pecado es la muerte.

Las consecuencias inmediatas de la transgresión

En Génesis 3:7, se hace referencia a que “fueron abiertos los ojos de ambos”. No se refiere a los ojos del cuerpo, sino que, a los ojos de la conciencia. Vieron la felicidad de la que habían caído y en la miseria en que se había precipitado.

1- Cuánta deshonra y desasosiego produce el pecado; produce daño dondequiera que se le admite
2- Qué engañador es Satanás. Les dijo a Adán y Eva, cuándo les tentó, que serían abiertos sus ojos; y así lo fueron, pero no como ellos lo habían entendido; fueron abiertos para su vergüenza y pesar.

En relación al versículo 8, inmediatamente después de comer del fruto prohibido, se apoderó de ellos el miedo. La causa de su miedo fue que oyeron la voz de Dios que se paseaba en el huerto a la brisa del día. Fue la llegada del juez la que les asustó.

Cuál fue el efecto y la evidencia de su miedo; se escondieron de la presencia de Dios quién se había convertido en algo terrorífico, y así no es extraño que ellos se hubiesen convertido en algo terrorífico para ellos mismos. Su propia conciencia les acusaba y ponía ante ellos el pecado. Sabiéndose culpables no se atrevieron a aguantar un juicio sino que se escondieron para huir del juicio. Nótese aquí la falsedad de Satanás, quién les había prometido que estarían a salvo, que obtendrían conocimiento, pero se encontraron perdidos y no sabían ni donde esconderse.

La alarmante pregunta con que Dios acosó a Adán (Génesis 3:9) y le detuvo: ¿Dónde estás tú?, no se refiere a un lugar sino a una condición. ¿Es esto todo lo que has conseguido por comer del fruto prohibido?
1-Esta demanda hecha a Adán podría considerarse como una benévola persecución a fin de restaurarle
2-Si los pecadores considerasen bien donde se encuentran no descansarían hasta volverse completamente a Dios

Génesis 3:12-13
Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí.
13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí.

Adán no sólo le echa la culpa a su mujer sino que se expresa de modo que también le echa la culpa a Dios mismo. Insinúa en que Dios ha sido cómplice del pecado pues le dio una mujer que le ha dado a él del fruto.
Eva a su vez echa toda la culpa a la serpiente. Entendamos que las tentaciones de Satanás son todas engaños, todos sus argumentos son falacias, todas sus seducciones con apariencia de verdad.

Es por el engaño del pecado por lo que se endurece el corazón.

Sentencia

Contra la serpiente:

Génesis 3:14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.

Dios parte la sentencia desde donde comenzó el pecado, diciendo: “maldita serás entre todas las bestias”. Esta sentencia puede considerarse como dirigida contra el diablo, el cual hizo uso de la serpiente sólo como vehículo en qué aparecerse siendo él el agente principal. Cristo frustró la tentación se Satanás con su muerte dando un golpe mortal al reino del diablo, dejando una herida en su cabeza que nunca será curada.

Contra la mujer:

Génesis 3:16 Ala mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido,y él se enseñoreará de ti.

La mujer es puesta en un estado de pesadumbre del cual sólo un detalle se especifica, el de criar hijos; lo que incluye pesar y miedo.
No es extraño que cuando se aumentan nuestros dolores es cuando se aumentan nuestros pecados, porque ambos comprenden innumerables clases de males.

En Efesios 5:22 se señala, esposas, sed sumisas a vuestros maridos; por la entrada del pecado ha hecho de este deber un castigo. Si Eva no hubiese comido del fruto prohibido ni hubiese tentado a su marido a comer también de él nunca habría podido quejarse de su sujeción, por tanto, nunca debería nadie quejarse de ello, lo que debería ser motivo de queja es el pecado que puso las cosas así.

En esta sentencia está mezclada la misericordia con la ira, la mujer tendrá dolores pero los tendrá al dar a luz hijos, y la angustia será olvidada por el gozo del que haya nacido. La sentencia no es una maldición para arruinarla sino que un castigo para llevarla al arrepentimiento

Contra Adán:

La sentencia contra Adán se divide en tres aspectos:

Génesis 3:17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.

Esta sentencia alberga también su dosis de misericordia, porque Adán no es maldecido tal como lo fue la serpiente. Dios tenía bendición reservada para él, ya que Adán queda aun por encima del suelo. La tierra no abre su boca para tragárselo.

Génesis 3:19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

Su trabajo será desde ahora fatigoso. Su ocupación antes de pecar era para él un placer. Si Adán no hubiese pecado no habría sudado, por lo que el trabajo es un deber que debemos cumplir fielmente.
Pero también en esta parte de la sentencia hay una cuota de misericordia. Sudará pero su fatiga hará más acogedor su descanso; no se morirá de hambre, tendrá dolores pero con este dolor comerá su pan lo cual fortalecerá su corazón.
Su vida también será corta, teniendo en cuenta lo lleno de problemas que estarán sus días. Pero aunque la vida resulte desagradable, la muerte será la culminación de su sentencia (Volverás a la tierra porque de ella fuiste tomado).
El hombre es una vil y frágil criatura pequeña como polvo. El pecado introdujo la muerte en el mundo, si Adán no hubiese pecado no habría muerto.

La expulsión del Paraíso

Génesis 3:22Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida,y coma, y viva para siempre.
23 Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado.
24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.

El método que Dios adoptó para expulsar y excluir del paraíso a nuestros primeros padres:

1- Los echó fuera: esto indica su expulsión y la de toda su raza de la comunión con Dios. Su relación con Dios quedó derogada y perdida quedando interrumpida y quebrantada. ¿Pero adonde los envió al expulsarlos del Edén?, sólo los echó fuera del huerto, el hombre fue enviado a cultivar la tierra de la que había sido tomado. Es de considerar que aun cuando Adán y Eva fueron excluidos de los privilegios de su estado de inocencia no fueron dejados en la desesperación, pues Dios les proporcionó un segundo estado de prueba bajo nuevas condiciones
2- Los retuvo fuera: privándolos de toda esperanza de volver al paraíso “Pues puso al oriente del huerto del Edén un destacamento de querubines”, para guardar el camino que conducía al árbol de la vida de modo que no pudiesen forzar la entrada y tomar el fruto del árbol, lo que intimida a Adán y deja claro que Dios estaba disgustado con él.
Desde aquel momento en adelante resulta inútil para él y para los suyos esperar vida, justicia y felicidad.

Dios se reconcilia con nosotros y sus ángeles, cuando por la obra de la cruz, es consagrado y puesto delante de nosotros un camino nuevo y vivo.

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